Una relación amorosa representa un vínculo fuerte con otra persona, sin dudas, es alguien en quien apoyarse en un momento difícil. En ese sentido, ser parte de una relación de pareja implica estar comprometido con el bienestar de la relación y trabajar frecuentemente para que todo marche bien. Al mismo tiempo, conforme pasa el tiempo el lazo se va haciendo más fuerte a partir de las experiencias compartidas, donde el amor, la comunicación y la confianza son los pilares fundamentales para conseguir una relación estable y positiva.
En ese sentido, estar involucrado sentimentalmente con alguien significa aprender y nutrirse de lo que tiene esa persona para enseñar, donde la meta es siempre ser mejores como pareja y como individuos. Además, es todo un reto generar confianza y empatía con una persona que no se tiene ningún vínculo sanguíneo, más bien por elección y decisión propia. De esta forma, al estar en una relación amorosa se debe tener presente que se trata de un proceso largo, que tiene distintas etapas, donde cada una representa una experiencia que dejará aprendizajes.
A pesar de esto, se debe tener claro que una relación tiene altibajos, algunos momentos pueden ser difíciles y otros, estarán llenos de sonrisas. En todo caso, lo importante es estar siempre dispuestos a mantener una buena actitud y buscar mejorar el vínculo. Por ello, hay distintos consejos que ayudan a entender cómo mejorar una relación amorosa, pero, asistir a sesiones de psicología de pareja siempre debe tenerse presente porque son los profesionales el mejor recurso de ayuda. A continuación, se describen algunos consejos que pueden resultar útiles.
- Construye el bienestar personal:
Una relación de pareja necesita del apoyo y motivación de ambos, solo así, se puede construir una base sólida que incluya el amor y la comprensión. Pero, no se puede compartir un recurso del que no se dispone, es decir, para transmitir bienestar primero se debe trabajar en construir la felicidad personal y el bienestar propio.
En ese sentido, estar listo para comenzar una relación comienza con estar contento consigo mismo, ya que, a partir de allí se puede compartir amor, tranquilidad, apoyo y bienestar. Entonces bien, dentro de lo más básico se encuentra trabajar en la felicidad personal aun estando dentro de una relación amorosa, ya que, desde el interior se puede ir emanando vibras positivas.
- Mantener el enfoque en la confianza:
El vínculo de pareja necesita de múltiples factores para que sea sólido, por supuesto, uno de ellos es la confianza. Estar plenamente seguro de que la pareja es plenamente sincero, está comprometido con la relación y tiene todas las intenciones de mejorar en cada momento; solo radica en la confianza, ya que, no se puede adivinar los pensamientos más íntimos de la pareja, así que confiar es el único recurso disponible.
En ese sentido, se debe promover la confianza a lo largo de la relación, entendiendo que no existe un tema prohibido dentro de las conversaciones de pareja. Solo así, se va construyendo la confianza necesaria para ir creciendo juntos, asimismo, ir generando la confianza necesita tiempo y puede destruirse en cuestión de segundos por una traición, en tal sentido, la sinceridad y transparencia deben ser las banderas de una relación que siempre quiere mejorar.
- Compartir tiempo y experiencias:
El vínculo emocional que existe entre dos personas nace a partir de compartir experiencias juntos, ya que, estas se traducen en recuerdos que van construyendo el apego emocional. De esta forma, una buena forma de mejorar una relación amorosa es atreverse a experimentar cosas nuevas, viajar, salir de la rutina con paseos inesperados y sorpresas de todo tipo. Así, se mantendrá vivo un interés que es la materia prima del buen funcionamiento de una relación.
De la misma forma, pasar tiempo juntos es esencial para sentirse más cercanos y estimular los lazos de confianza. Muchas veces, el trabajo y otras responsabilidades representan una inversión de tiempo importante, a pesar de esto, se debe manejar una agenda que permita compartir momentos juntos, haciendo planes compartidos en el tiempo libre que coincide. Así, se demuestra a la pareja que el interés por la relación sigue intacto.
- Mantener una buena comunicación:
Expresar lo que se siente con plena libertad es parte de lo más importante para construir una relación llena de buenos momentos, amor y apoyo mutuo. En muchos casos, existen problemas que nacen a partir de una pésima comunicación, es decir, desde la incapacidad de transmitirle a la otra persona lo que ha causado un malestar o un disgusto; con el pasar del tiempo, ese problema puede desencadenar uno mayor y todo pudo haber sido solucionado desde el consenso y la comunicación.
En ese sentido, se debe estimular permanentemente un buen canal de comunicación, siendo capaces de expresar sus sentimientos sin restricciones, tanto los que son positivos como aquellos que pueden causar una diferencia de criterios, solo así, se pueden detectar los problemas y hallárseles una solución rápida y efectiva. De hecho, la psicología de pareja es una buena herramienta para promover la comunicación y confianza, abriendo la posibilidad de expresar sin cohibiciones.
- Trazar metas juntos:
Es una realidad que cada persona tiene sus aspiraciones, motivaciones, objetivos y metas individuales, tanto de carácter laboral como personal. Sin embargo, cuando se forma parte de una relación, una parte de esas aspiraciones deben estar compartidas con la pareja y es importante aclararlas en algún momento.
De esta forma, se puede establecer el nivel de sintonía que tienen como pareja, ya que, sirve de medidor para entender si ambos van al mismo ritmo y tienen la misma proyección e ideas respecto al futuro. Además, funciona para mejorar la relación al dar a entender que son una parte esencial de la vida de ambos y el crecimiento que buscan es compartido, asimismo, expresa qué tan mutuos son los sentimientos que se tienen.
- Ser independientes:
La individualidad es un rasgo innegable en el ser humano, por ello, al estar dentro de una relación amoroso se debe aprender a ser independiente aun cuando se comparten espacios de convivencia y mucho tiempo juntos.
Muchas veces, el fracaso o los problemas de una relación nacen a partir de la fatiga de estar junto al otro, precisamente porque todas las actividades son compartidas y no se tiene tiempo propio. Por supuesto, cada uno necesita su tiempo de independencia para dedicarse a actividades o entretenerse de la forma que lo prefiere, eso no significa que se haya perdido el interés en la pareja.
En ese sentido, dentro de la psicología de pareja un consejo frecuente es que la pareja debe aprender a estar solo mientras se está acompañado, es decir, buscar sus propias aficiones y gustos para no incurrir en monotonía. Sin embargo, esto no quiere decir que se debe olvidar por completo de compartir tiempo juntos, ya que, como se dijo anteriormente, compartir experiencias y momentos es parte de la construcción del vínculo, pero, lo más conveniente es encontrar un buen balance con el que ambas partes estén contentas.
- Abrirse al entendimiento:
Por supuesto, al compartir dentro de una relación de pareja es normal que aparezcan ciertas diferencias de criterios, es imposible coincidir en todas las opiniones. Sin embargo, una forma de mejorar la relación y hacerla más sana es siempre estar abierto a entender las motivaciones de la pareja, ya que, a partir de allí se puede interiorizar lo que lo motiva o el trasfondo del accionar.
De esta forma, lo más prudente es escuchar sin juzgar, sin estar predispuesto a que tendrán disparidades, todo lo contrario, se debe ser lo más abierto a las opiniones contrarias posible. Además, esto estimula la confianza porque la pareja se sentirá cómodo al hablar de distintos temas, al comprender que puede ser entendido sin ser juzgado de forma negativa. Asimismo, sirve para el crecimiento personal al aprender a entender una misma situación desde dos perspectivas distintas, con la capacidad de ponerse en el puesto del otro y crear empatía a partir de ello.
- Aprender a solucionar problemas:
Es inevitable que aparezcan percances dentro de una relación amorosa, los motivos son variantes, pero suele suceder por tener formas distintas de entender una misma situación. En tal sentido, al entender que los problemas son una realidad y se debe aprender a vivir con ello, lo más importante es no estancarse en esas situaciones llenas de dificultades, por supuesto, lo relevante es aprender a solucionarlos de la forma más rápida y efectiva posible.
Por supuesto, cada relación tiene su propia forma de afrontar las situaciones y esto dependerá de la dinámica de la relación, pero, se debe detectar un método que sirva para definir los problemas y hallar una vía de solución para ellos, por lo general, todas coinciden en que el consenso es la principal herramienta para conseguir una buena forma de ponerle fin a un problema.
- Mostrar todo el cariño y afecto que se siente:
Una relación de pareja se construye sobre el amor, si ese sentimiento de cariño y aprecio se acaba, puede que ya nada funcione de la misma forma, ya que, ese es el combustible que motiva a seguir juntos, superando cada obstáculo y haciéndole frente a cualquier circunstancia.
En ese sentido, resulta prioritario demostrar todos los sentimientos que se tienen por la pareja, mostrar con pequeños detalles todo el amor que se siente, expresando con plena libertad el cariño que se ha ido acrecentando a lo largo del tiempo. En ocasiones, se da por sentado que la pareja es consciente del nivel de amor que se le tiene y en realidad, eso puede no ser así; muchas veces, sin importar el tiempo que pase, se siguen necesitando esas muestras de cariño que confirme que los sentimientos siguen intactos y vivos.
Al mismo tiempo, se puede sentir miedo al expresar el amor que se siente, bien sea, por temor a no ser correspondido o porque se tiene la concepción de que si se demuestra demasiado la otra persona perderá el interés. Por supuesto, este pensamiento no debe ser un motivo de limitaciones, ya que, cuando se siente amor, este debe expresarse y luego, evaluar los resultados y trabajar en función a ello. Si es la persona correcta, nunca será suficiente amor qué demostrar.
- Siempre promover el respeto:
Las discusiones son una consecuencia directa de los problemas, durante una relación amorosa es común que estas aparezcan, en mayor o menor medida. Entonces bien, en situaciones donde los ánimos están caldeados puede que aparezcan emociones totalmente negativas, tales como el enojo, la frustración y la tristeza, a pesar de esto, se debe evitar actuar con el criterio y la objetividad sesgada porque esto conlleva a emitir comentarios hirientes e inclusive, escenas de violencia física.
Todo esto, debe evitarse y no puede ser tolerado, ya que, la relación debe estar basada en el respeto tanto como en el amor y el hecho de acudir a la violencia de cualquier naturaleza, transgrede los límites establecidos del respeto. De tal forma, cualquier falta de respeto lo único que promueve es la ruptura y el desapego, por supuesto, ese no es el resultado que se quiere, de tal forma, lo más prudente es trabajar para encontrar la forma de resolver los problemas desde la calma, serenidad, tranquilidad, el consenso y el mutuo acuerdo.
En definitiva, las relaciones de pareja son toda una experiencia que se debe disfrutar, se trata de un aprendizaje continuo y proceso de crecimiento tanto a nivel personal como para la pareja. Aprender a convivir juntos es parte de todo lo que significa estar junto a alguien, por supuesto, existirán distintas actitudes, hábitos y costumbres que estén en disonancia con la otra persona, pero, se trata de tiempo y entendimiento para conseguir un punto medio entre lo que es esa persona y lo que puede llegar a ser por el bien de la pareja. Por supuesto, existirán problemas a partir de esas diferencias, pero la clave están en estar dispuestos a ser cada vez mejores para el otro y para sí mismos, de hecho, acudir a psicología de pareja es parte de lo que significa querer aprender a ser una mejores relación.